El corazón sano, que en árabe se dice Qalb Salîm, es el que pone a su dueño a salvo el Día de la Resurrección (Yaumul-Qiyâmah), tal como Allâh dice en el Qurân: “El día en que ni la riqueza ni los hijos servirán de nada. Sólo quien venga a Allâh con un corazón sano” [Sûrah Ash-Shu‘arâ (26), âyah 89]. Y salîm quiere decir que ese corazón está a salvo de enfermedades y se encuentra en paz.
